A veces cuando tengo tiempo miro hacia atrás…
Buscando respuestas me adentro en mí ser,
Que habría sido de mí? Podría haber sido todo distinto?
Las palabras se quedan cortas, mis lágrimas responden.
Tal vez la vida me ha elegido este camino,
Podría quizás agradecer el sufrimiento que pase,
Me ha hecho crecer,
ser la persona que soy;
Saber quién está de verdad conmigo.
Pero no quiero mentir, a veces lloro al recordar
Al pensar, que sería de mi si me quisieran?
Si tuviera una familia a mi lado para abrazar
Que me acompañe en mis logros,
Escuchar “hija de ti estamos orgullosos”.
Cuando las cosas más simples son las que escasean,
Siento que mi vida siempre fue contracorriente.
Que por más que lo intenté no sirvió de nada,
Que este mundo está lleno de personas “buenas y malas”.
A veces hay que tomar decisiones que duelen,
Hay que saber levantar la cabeza un día más,
Mirar alrededor y sentir que no está todo perdido,
Que aquellos que hacen daño han de quedar atrás.
No solo hay que ser buenos con los demás,
Hay que saber quererse a uno mismo,
Si las personas que quieres te dañan y manipulan,
Nuestro amor propio debe ir más allá.
Luchar por uno mismo,
A veces es la única forma de vivir en armonía,
Aprender que quien nos quiere de verdad
Debe tratarnos bien y respetarnos.
He crecido. Este sufrimiento va conmigo,
Pero no me va a impedir mirar más allá,
Hay muchas personas aún para amar,
Para admirar y poder compartir su felicidad.
Esas madres que luchan por sus hijos, por darles lo mejor,
Abuelos que se adaptan a los nuevos tiempos,
Cuya mayor alegría es el simple hecho de estar juntos.
Son todo un ejemplo de vida que se debe apreciar.
Pero cuando alguien no te trata bien debes abrir los ojos
No todo está justificado, hay cosas que puedes evitar.
Debes ser fuerte, sincero contigo mismo.
Saber que no estás solo y puedes salir adelante.
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